\*£&:if<:** w& =r"v '■¡!.>»«WÍ»* ...-Oí.'fVMr.xJ fc-V ^ZJP" Ai UNITED STATES OF AMERICA «& * * ^(BB8£ ■Ót f* f -r¡Bg1 1=1 9Sr ^r ^^8 ¡F'A ^V^^E ❖ ^ ^ * > + ^ FOUNÜKD 18 3 6 r r WAS HINCxTON, D.C \ B-ugüt oí F. Pérez ele Yeiasoc Octcber. 1912. Tno South American txp'oratíon Fund Vale University. s~ 4 ci> \ t w» ? » r \ /HmV*^ \\\ £<>»$ ACTUACIONES LITERARIAS DE LA VACUNA EN LA REAL UNIVERSIDAD DE SAN MARCOS DE LIMA. • * • Impresas en la real casa de niños expósitos + AÑO DE M.DCeCVII. **************************** * * * ... fo'/zc namque Colonus * * . . * %>Edidicit truncis peregrinwn includere germen.* 4 Vanier. Praed. 1. VI . * * * * * #****j^***f ****************** JC¿n el año de 1802 padeció Lima una epi- demia de viruelas ( a ). Describióla el Doct. Don Gabriel Moreno en el Almanaque del *■* > ■" ■ "■.........■"" ■ ■■* ......"....." ** - *" ( a ) La cruel epidemia de 1802 siguió hasta el año de 1805 , fomentando la inoculación anti- gua de tal manera el contagio, que este Superior Gobierno se vio obligado á prohibirla baxo de fuertes penas dentro déla Capital. Á fines de 1805 tuvo la felicidad el Doctor Don Pedro Belomo, Médico Cirujano mayor del Apostadero de Ma- rina , de que el pus vacuno conducido en vidrios de Buenos-Ayres le surtiese en un muchacho , pro- duciendo un hermoso grano. Este Excmo. Ayun- tamiento dio gracias muy solemnes al Todo Pode- roso por este beneficio , con el que comenzó á extinguirse esta mortal , y larga epidemia . Los que murieron en ella fueron muchísimos , y sen- timos no poder asegurar el número, por falta de los estados necrológicos-, que en los años anterio- res formaba el recomendable , y benemérito Don José. María de Egaña , siendo Teniente de Policía. año siguiente , y caracterizando su maligni- dad , refiere la historia de un niño , cuyo cuello tenia unas grietas que penetrando has- ta la traquea salía por ellas el ayre de la respiración. Notaba al mismo tiempo este rcélebre observador y literato, que las ten- tativas hechas con el pus vacuno conducido en vidrios no habían surtido efecto alguno. El Señor Ministro de Gracia y Justicia Don José Antonio Caballero leyó á sus Majes- tades esta 'descripción , y qnedáron tan cons- ternados al oiría , que el Rey nuestro Se- ñor preguntó , si no habría algún medio de socorrer sus Pueblos de América, conducién- doles fresco el pus vacuno. Se le respondió que para esto era necesario formar una ex- pedición marítima , en la qual se embarcase un competente número de Jóvenes que no hubiesen padecido la viruela ; y baxo la con- ducta de Profesores inteligentes se fuese pa- sando de brazo en brazo la vacuna hasta ponerla en las costas de América , y des- de ellas comunicarla á lo interior de sus Provincias. Pero que esta expedición deman- daba crecidos costos , los que no podía sufrir el Erario, por lo exhausto que se ha- ll-iba con las pestes padecidas en la Penín- sula , con los grandes gastos que originaba la guerra, y con las muchas necesidades que opri- mían á la España. S. M. contestó se hiciese el ultimo esfuerzo, y se diese á su corazón el con- suelo de libertar de la viruela á sus Pue- blos de América. En conseqiiencia de esta orden para siempre memorable en los fastos de la humanidad, se formó la Real Expedición Filantrópica de la Vacuna, que ha mereci- do los aplausos de toda la Europa ( b ). ( b ) La expedición filantrópica da la vacuna •alió de la Coruña el i de Diciembre de 1803 , y llegó á Puerto Cabello en la costa de Cara- cas el 19 de Marzo de 1804, después dz haber vacunado en las Islas de Tenerife , y Puerto Ri- Los Profesores nombrados para diri- girla fueron Don Francisco Xavier Balmis , y Don José Salvany. El primero después de haber atravesado la América Española del Norte , se embarcó para las Islas Filipinas, de donde ha extendido el beneficio de la vacuna al Imperio de la China. El segundo después de haber corri- do todo el Vireynato de Santa Fe , y par- te del de Lima llegó á esta Capital á tiem- po que ya se empezaba á temer alguna j>irr---.....11 imi ni 11 11 rm-----...... „^__^_^^_^^——— co. En el mes de Mayo se dividió siguiendo ia una parte a las órdenes de Balmis para México, y la otra á la de Salvany para la América Me- ridional. Los individuos de la expedición del Sur han vacunado por sí mismos en el Vireynato de Santa Fe mas de ioo0 , y en el del Perú hasta Noviembre del presente año pasan de 40®. Las vacunaciones verificadas por medio de los sugetos ü quienes han instruido , entregando niños con her- mosos granos para diseminarlos de brazo á brazo en todas direcciones, son incalculable^ invasión en nuestras costas por las armas Inglesas. La Real Universidad de San Marco?, para dar á nuestro Soberano un testimonio de gratitud , concedió á Salvany, con anuencia del Excmo. Señor Virey , los grados de Ba- chiller , Licenciado , y Doctor en Medicina. Desempeñó el agraciado con mucho acierto los exámenes literarios , que preceden á estos gra- dos . Para el de Bachiller puso por titular Médica : que el Galvanismo era una electrici- dad negativa , por cuyo medio se explicaban) los fenómenos que producía en el cuerpo hit* mano; y por Física: que los picos de ío$ Andes haciendo de conductores eléctricos des- cargaban la atmósfera de la costa > c im-* pedían tronase en ella. Para el grado d$ Doctor publicó las Teses que van aquí in- sertas. El Doctor Unanne , que presidió es- tas funciones , valiéndose de esta reunión de circunstancias, pronunció los Discursos que se imprimen á continuación de las Te- ses. Pocas veces se han visto en un au- ditorio de sabios y hombres de cultura im- presiones mas fuertes, que las que causó el primer Discurso , proferido con el tono, y acción correspondientes á los sentimientos que encierra , y que están altamente im- presos en los pechos americanos. TMESIS MEDICA- VACCWA , DWmUM VARIOLARU2'í PROPHTLACTICI/M , IlVMAKÓ INSERTA CORPORI, íTtfJí/S TX7EGRAM. CONSTIXUTIONEM AFFICERE VIDETUR . TMESIS FMYSICA • CAICRIS MATERIES , VULGO CALÓRICO , 7A.7M PRIMA CORPORIS PRINCIPIA STATVEKDA. QUAE, PRO GRADU LICENTIATUS WMEDICINA, AU8PÍCE DEO, ET PBAE5IDE D. D. HIPPOLYTO UíTAín/JS AKATOMES PROFESSORE , VEFENDENTUR AD. JOSEPHO SALUANY ET LLE0PART s BACH. MEDICO PHYLANTROPICAE EXPEDITIONIS , /ÍAtftf j:r MUNIFICEXTIA CAROLI IV WSPANIATOM ET INDIARUM REGÍS PlENTtSííMÍ3 VACCINAM NOUO ORBI DEFERENTIS PRO-DIRECT0RE, IN REG. AC P0NTIF. DIUI MARCI ACADEMIA DIE 8 NOUEMBRIS ANNI 1806. \ DISCURSO QUE, PRESIDIENDO EL GRADO DE LICENCIADO EN MEDICINA Á DON JOSÉ SALVANY, VTCE-DIRECTOR DE LA REAL EXPEDICIÓN FILANTRÓPICA JDM 1LA 1TACWNA, PRONUNCIÓ EL D. D. HIPÓLITO UNANUE EN LA REAL UNIVERSIDAD DE SAN MARCOS, EL DIÁ 8 DE NOVIEMBRE DE iSotf. Hic ama dici PATÉR , ütqat PRINCEPS • Horat. Nam finem..........•• íucdbus imposuit, venitqae salutifer Urbi . Ovid. («) SEÑOR: JL¿ os sentimientos de amor, y gratitud que siempre ha manifestado V. S. á sus Monarcas Augustos , se renuevan en es- te acto solemne para unirse á las gratas aclamaciones con que el Pueblo america- no bendice el nombre benéfico del Señor CARLOS IV. Alábense unos Príncipes de estreme- cer la tierra con el horrendo ruido de las armas : gloríense otros de llevar el terror y la miseria del uno al otro po- lo , sobre las movibles ondas del océa- no : eríjanse enhorabuena en el conti- nente y en las aguas monumentos de sangre que señalen á la posteridad los héroes nacidos en nuestros dias para desgracia del género humano . Toda la gloria de nuestro buen REY quede reducida á ser su benefactor en estos tiempos infelices. Jamas la historia ha descubierto es- .(•3 ) cena ,mas horrorosa, que aquella en que aparece el siglo xvm tocándose y enlazán- dose con el xix . El Pó y el Rhin , el Nilo , el Indo y el Paraná corren teñi- vdos de la sangre humana. Las islas y los mares^ resuenan corr los golpes del canon devastador. ¡ Hombre ! ya en toda la extensión del globo que habitas no queda un albergue seguro á la paz . ¿ Tan largos son tus años , tan odiosa tu existencia , que el hierro y el fuego deban cortarlos en medio de su carre- ra? § No bastan las otras causas físi- cas y morales con que los elementos te arruinan, y tú mismo te destruyes ? ¿ No bastan los venenos mortíferos que han vomitado contra tí los desiertos espan- (43 tosos del África ? Salió de estos el de la viruela, que á manera de un rayo desolador, ha corri- do uno y otro hemisferio, vengando con crueldad las cadenas que hemos echado sobre sus habitantes. ¡ Y qué caras cuestan á la América las que estos arrastran sobre su suelo ! De otros males por graves , por fecundos que sean , se observa que se moderan con su duración, ó repiten á largos intervalos, permitiendo que repose y se restablezca el linage humano^ pero la viruela crece en alevosías, y maligni- dad con los años: precipita del trono á los Monarcas , despuebla las ciuda- des , y arruina las cabanas. ¿ Quál será la suerte de los vivientes raciona- (5) les , si á esta feroz calamidad que los persigue sin intermisión , se juntan los estragos de una guerra la mas destruc- tora, la mas desapiadada , la mas general ? Pero el Padre de los hombres no quiere que aun se aniquilen ías estatua* que formó del barro para depósito de un espíritu inmortal. En la.propia isla don- de está abierta la caxa de Pandora que infesta el universo, ha revelado el feliz preservativo de la viruela . Sus víctimas quedan ya libres para llenar los huecos que dexan los hombres muertos por h espada . La vaca, ese animal in- estimable, que nos alimenta con sus carnes, y regala con su leche , madre del buey nuestro amigo y compañero en 4 . (O las quietas labores de la campaña, llevaba en sus prolíficos pechos el precioso antí- doto . Tributemos elogios inmortales al Dr. Jenner , á cuyas manos confió la Providencia soberana tan venturoso desc- ubrimiento . Ya puedes, Europa, con- solarte en tus desastres . La guerra ca±- mina exterminando tus varones ; pero le sigue al pie la vacuna reemplazán- dolos con los niños que arranca de la muerte. Estos hermosos pimpollos de la estirpe humana crecen lozanos, libres del ayre pestilente que los sofocaba, se fecundan , y la multiplican . ¿Y tú , América? .... Ya se oye en Haiti, primera conquista de Colon , el (?) bronco ruido de la artillería , y corre á torrentes la sangre colonial vertida por manos bárbaras é implacables . Con sem- blante airado mira Marte al Continen- te, y el pacífico océano siente el estruen- do del bronce inflamado. ¡ Dios ! .... Ocupados en enterrar los hijos que nos mata la viruela, en llorar las esposas que nos arrebata de los brazos: vestidos de luto tras el féretro de nuestros padres ancianos que han perecido de lo propia plaga: asola- dos por ella las costas, las sierras, y los montes; ¿queréis suframos el azo- te de la guerra para que acabe lo que resta de moradores ? ¿ Estas fértiles C (• 8 ) praderías, estas magestuosas montaña»' que bendicen tu clemencia, liberalidad y grandeza , quedarán yermas? Lis gotas del humor vacuno, en quien tu mano poderosa ha depositado tantas utilidades y misterios, parece no estar destinadas al bien de la América, porque pierden su virtud transportadas4 por los mares. ¡ Como pues se re- poblarán sus provincias que devasta la viruela, al tiempo mismo que las amena- za la espada enemiga. ¡ Peruanos ! .... ¡ Qué imagen tan triste se presenta á mi espíritu, considerando estos sitios dichosos cubiertos de ruinas funestas, que con silencio melancólico digan: aquí, en otro tiempo, estuvieron los hogares (9) pacíficos donde florecían la religión, la fidelidad, y los ricos ingenios del Perú. Pero no.... hay un gran REY.... Mi corazón se enternece al repetir su nombre. Jamas han penetrado en mi alma ni mas vivos, ni mas fuertes sentimientos.... y para no interrumpir el discurso con mis lágrimas , es preciso que haga violencia á mis ojos.... Qtiando se señale la serie de los Reyes de España, escribía un eloqüente Magistrado en nues- tra Sociedad Académica , se dirá al indicar al Señor CARLOS IV. este es el Padre de la América , y al escuchar ese tierno renombre, resonarán las mas ( 'o) sinceras aclamaciones del gozo, y el res- peto a . Penetrado este gran Monarca de amor y compasión para su hijo el pueblo Americano , concibe y hace verificar el proyecto para siempre memorable de una Expedición Filantrópica, que transmita de brazo en brazo el celestial preservativo de la Vacuna, desde las costas de España hasta las de América. § Podrá en medio del esplendor del trono percibir todos los efectos saludables de su beneficencia paternal ? Después de haber saltado de isla en isla por en medio del atlántico a Señor Don José Baquijano, Mercurio Peruaw : toro. Y. pág. 285 . ( M ) los Profesores encargados de cumplir su voluntad soberana , y corrido dilatados espacios del nuevo Mundo, han conduci- do la vacuna hasta el corazón de la China. Acaso ahora mismo estarán acom- pañando á mis voces otras de admira- ción y reconocimiento en Macao, Cantón, Pekín . Pero ¡ qué espectáculo mas tier- no , ni mas tocante que el que ofrece la América Meridional ! Destinado á ella el virtuoso literato, á quien tengo el honor de presidir, se ha internado hasta las rancherías sepultadas en sus inmensos y fragoso» bosques . „ Amigos, •el REY vuestro Señor y Padre, decía á los pobres salvajes, os envía este reme- (I») dio que liberta de la viruela . Ya podéis esperar una posteridad numerosa: ya no tenéis porque huir de vuestras esposas de Vuestros amigos, de vuestros padres5 ni porque incendiar vuestras chozas, dexando esta tierra regada con el sudor de vuestro rostro á merced de las fieras'4. Para reconocer el beneficio basta ser racional; así en el pecho de nuestros rústicos indianos están grabados tan alta- mente los cuidados paternales de nuestro buen Monarca , como en el de los cultos ciudadanos que los aprecian, y meditan con ternura. ¡Gran REY! Nosotros no po- demos testificaros de otro modo nuestra gratitud , que asegurándoos de nuestra («3 ) fidelidad y sumisión. Qualquier tormén-* ta que amenace á este r^co Imperio en guerra tan desastrada , permaneced tran- quilo. Millares de hombres correrán á defenderlo con el interés y animosidad de hijos á quienes, sosteniendo la causa de su Padre, no les queda otra esperanza en este mundo, que la victoria , ó la muerte. Ni se crea que mis voces son las de un hombre que desde una alta y segura roca insulta las furiosas olas del mar, que se estrellan á sus plantas. El Callao *, Cartagena c y Buenos-Ayres d b Nadie ha entrado ni mar de! Sur con designios mas altos que Jácobo Eremite en 1624. Once navios montados con 294 cañones, y i5oo hombres de tropa disciplinada debían tomar á ( M J han acreditado en todos tiempos la noble energía de la América del Sur. Y que sé yo si llevados del amor á Lima . Pero no solo no pudo desembarcar un so- lo hombre en el Callao en cinco aieses de sitio; mas ni aún tomar á Pisco , ni Arica, por don- de pensaba internarse á Potosí. Así el autor ingles de este viage, dice: que los finos proyectos de 'conquistar las Indias formados en Holanda, vinieron al fin á parecerles unos dramas romancescos, que ni ellos ni otros algunos podrían ejecutar. c Nuestras relaciones aseguran, que en la expedición del Almirante Wernon contra Carta- gena en 1740 perdió la Inglaterra gd hombres. Pero Moseley , autor ingles , hace subir la pérdida á 20.0 . d El Señor Don Santiago Liniers acaba »—— ■ -------r- -■ ■! ■ , ■ ■■ ■ , |....... i n» ( f ). Demosthenes; Orado Futiebris. ( »r) _____ doctoral á e^te benemérito literato, á qui- en se dignó elegir para traernos el flui- do vacuno. Colocándolo en la mas sabia y mas antigua Academia del nuevo Mun- do, le damos un:testimonio solemne del zelo y caridad con que ha desempeña- do los deseos de nuestro Soberano en las Provincias del Norte: y le imponemos una nueva obligación para que hs dé todo su lleno en las que le restan al Sur. rs. GRAWLATIO S0LEN1SUS, CÜM D. JOSEPHUS SALVANT VACCINAE PRAEFECTÜS DOCTORIS lauream: ET insignia reciperet9 SACRAS SCH0LAE CERIMONIAS IMPLERET IN DIVI MARCI UNIFERSIIJIEi HABITA DE 1T0KR A D. D. HIPPOLYTO ÚNAME JPJRJU. KALEND. DECEM3. AJW. CIj Ij CCCVl, DISCURSO QUE , PRESIDIENDO EL GRADO DÉ DOCTOR EN MEDICINA . A DON JOSÉ SALVANY, VICE-D1RECTOR DE LA REAL EXPEDICIÓN FILANTRÓPICA JDJE JLA VACUNA, PRONUNCIÓ EL D. D. HIPÓLITO UNANUE EN LA REAL UNIVERSIDAD DE SAN MARCOS, EL DÍA 30 DE NOVIEMBRE DE 1806 . ( ">) PERILL. D. RECT.cet. \) uod precati estis a DEO O. M. honor um omnium largitore munificentissimo, vt hispanos reges, Peruvii imperatores semper augustos, incólumes, felices, trium- phatoresque seraet : quae pro reginis, pro principibus, pro ómnibus imperii populis iam din ab instituta academia vota per- soluistis , ea hodierna die maiori pompa, et vltra humanam conditionem maiestate nuncupantúr. (») SEÑOR: JL/esde la fundación de esta Acade- mia ha ofrecido V. S. votos solemnes al Todopoderoso, fuente inagotable de todo bien, para que conserve á los Reyes de Es- paña nuestros augustos Emperadores ilesos , felices y triunfantes. De la misma manera los ha instituido por la salud de las Reynas» de la .Real familia y prosperidad de todo el Imperio . Pero los que en este dia se cele- bran , aparecen con una pompa nunca vista, y una magestad extraordinaria, que supera la condición y fuerzas de la naturaleza humana. Quantum enim patrum memoria tra~ ditum, quantum scholae monumentis serua- tum, quantum egomet tempore meo actum vi di, nunquam , quod memoren, audito REGÍS nomine , academiae columnaé lae- tiíia permotae contremuere; ñeque imagines summorum virorum, qui ex hac mortali iam ad aetemam vitam migrarunt, colorí- bus ita viuis expressae ., sese obtutui obtulerunt, vt non tam pkturae, et simula- era, quam cor por a animis praedita ere- derentur, Hodie vero CAROLI IV nomine $onoris musarum hymnis resonante , templi farietes placide exultare videntur, ipsas- que sapientum vmbras, quasi vita pollerent, descenderé, hasque antiquas eorum sedes (*3) Porque jamas se ha oido decir á nues- tros Padres, escrito en los monumentos de esta Escuela , ni visto por nosotros, que el nombre de nuestros Reyes pronunciado en estas aulas produxese tanto júbilo, que has- ta las columnas de ella se conmoviesen agi- tadas del placer , y que las imágenes de los grandes Varones, que ya pasaron del tiempo á la eternidad, se reanimasen por el mismo de tan vivos colores , que mas bien que li- enzos ó simulacros , pareciesen cuerpos dota- dos de un espíritu viviente . Pero ahora, que los sonoros himnos de las Musas hacen resonar el nombre glorioso del Señor CARLOS IV, las mismas paredes de este Templo se conmues'en dulcemente: y las sombras, baxo las quales el pincel con- serva la idea de nuestros Sabios, parece, como si estuvieran animadas , que descienden y se sientan en estas sillas , que ocuparon en otro E ■(«o occupare. Obstupesco rem adeo insotitam contemplando ! Imperii fines in vltimas orbis terra- fum oras, fauente victoria ducere, ditio- ties Ionginquas subiicere, arces munitas , oppida fortissima solo sternere , magna haec quidem sunt, sed humana. Pópalos autem a morborum strage liberare, vitam pereuntibus largiri, pestes fugare, hominum- que dies augere , non humana sed diuina habentur , et praedicantur. Quodtamen, quale quantumque donum sit , id omne tmiestati tuae, et beneficentissimo numinh CARÓLE REX, acceptum referimus. Quam siquidem Peruvii regna ¡ate patent, tam mortiferis variolis subüersa, ( »s ) tiempo . Este asombroso espectáculo embarga mis sentidos . En verdad dilatar los términos del Im- perio baxo los auspicios de la victoria hasta confundirlos con los últimos del Mundo, sub- yugar los Reynos lejanos ; y echar por tierra las ciudades y castillos, para cuya defensa han hecho sus últimos esfuerzos el valor y el ingenio, es una cosa muy grande, pero que no excede la capacidad del hombre. Mas librar á los pueblos del azote destructor de las enfermedades , restaurar la vida á ]cs que iban á parderla, extinguir las pestes, y prolon- gar los dias del hombre, sobrepuja á la virtud humana , y solo es propio de la divina . Pues con todo , quan grandes puedan ser estos beneficios, los ha recibido el Perú, como de un benéfico Numen, del Señor CARL05 IV . La viruela, la mortal viruela tenia .me- noscabada f despedazada , y aniquilada la po- ( «o íaniata, ruinis, et sepulcris foedá, misera? depopulata iacebant. Cum vero summo DEI beneficio , vaecha moHalibus conce~ 4itur , singulari PRINCIPIS NOSTRJ pietate in Americam deffertur. Eximia quadam animi celsitudine aerarii angustias^ belli calamitates, Hispaniae inopiam et egestatem superante, lar gis sumptibus ame- rieanis suis, etiam tectis siluestribus et ni-r gris montium antris instar ferarum de* gentibus, iré opitulatum iussit. Spirat suauis vaccinaefauonius, lethcir lis pellitur lúes, nouaeqtte surgunt de tumu- tisvrbeii agri inculti et derelict/\ ver- ( 2? ) blaciorv de los dilatados Reynos y Provincias de este rico Imperio , y solo aparecían rui- nas y sepulcros que desfiguraban y hacían horroroso su suelo . Pero luego que, por un beneficio nunca bastantemente agradecido, con- cedió la divina Providencia á los mortales la Vacuna, ha sido este preservativo inesti- mable conducido á la América por la piedad del REY . Superando con aquella grandeza de alma que á él solo es propia todos los obstáculos que oponían, la escasez del Era- rio , las miserias de los Pueblos de España, los gastos y calamidades de la Guerra, qui?o que á todo costo se corriese al auxilio de sus hijos los Americanos, aun de aquellos que co- mo fieras habitan en lo profundo de los bos- ques , y en las cavernas obscuras de los men- tes . De este modo se extiende la Vacuna á manera de un blando zéfiro, que destierra (a«) tente denuo vomere glebas, virescere in~ cipiunt, et repercutere eolles dulcissimos laUos , qui bus matres teneros infanteyob~ lectant, et gratulantur. En tita o REX muñera pro quibus ACADEMIA solenmia instituit, et non doctores modo et magistri, ceterique homi- nes gratias tibi rependunt máximas', sed tabulae etiam, et marmora sensus nusquam habitura. Ergo PATER Americae , Peruuii delicium, gentis nostrae variolis periturae seruator, Lycei ¡imam praesidhim ac tuta- mentum firmissimum , inclyte CARÓLE , dum nostras oras aüuat immensus oceanus, dum antium alta inga aeternis albescant ;■(„»* ) esta peste, y reanima la naturaleza corpórea „ Ya de entre los mismos túmulos se ven levan- tarse nuevas ciudades: los campos que esta- ban abandonados y eriazos, cultivados de nue- vo, comienzan á reverdecer , y á repetir los montes los dulces arrullos, con que las madres deleitan y felicitan á sus tiernos hijos . Estos son, ó gran REY, vuestros incom- parables beneficios , por los quales la Acade- mia os ofrece estos solemnes votos , y os tri- butan gracias muy tiernas, en medio de la gloria , festividad y júbilo extraordinario que los rodean, no solo los Doctores, los Maes- tros, y los demás hombres; sino también las pinturas y los mármoles que carecen de senti- do . Pues penetrados de tan grandes sen- timientos, REY ínclito, Padre ele la Amé- rica , delicias del Perú , y el mas firme apo- yo de esta Escuela , os aseguramos que mi- (36) muibus, intonetque ibifilmen, tempestóte* que micent sonorae, tamdiu in animis nos- tris impressa manebit, eum chara nomi- nis TVI reeordatione , memoria benefieii sempiterna. Tu vero qui vt tanti REGÍS iussa exequereris , quam plurima térra marique exantlasti pericia, dilecte SALVANT, in. gredere, et inter daros noui orbis Vni- uersitatis principis sede doctores. Hic te ¡audibas ornabimus : laudibus inquam praemia digna viris , qui mente litteris^ animo virtutibus excultis, reipublieae auxi- lio fuere praestantissimo. quam sortem tibi a natura inditam, studio , et probitate firmasti: labore, et obedíentiaperfecistí. (3«) entras bañe nuestras-orillas el inmenso océa- no , mientras blanqueen las altas cumbres de, los Andes cubiertas de nieve tan antigua co- mo el mundo , brillen allí los relámpagos y retumbe en ellas el trueno pavoroso , perma- necerá impreso en nuestros pechos el recuer- do querido de vuestro nombre augusto, y será eterna la memoria del beneficio recibido . Y Tú y' amable Salvany, que por obedecer las órdenes de un REY tan gran- de , te has expuesto á tantos peligros por mar y tierra, entra á reposar de ellos, ocupan-, do un asiento entre los esclarecidos Doctores de esta Universidad, la primera y principal : del nuevo Mundo. Aquí tributaremos á vuestro mérito los elogios que han Vido en todos tiempos el premio debido á los Varones, que habiendo ilustrado su entendimiento con la luz de la sabiduría, y conformado su ánimo á los severos preceptos de la virtud, sirvié- F ( 3») Iltustria exempla studii tul, et in scientiis profectus nobis praebuere concer- tationes de galvanismo, et vaccina, quas pro obtinendis Medicinae gradibus, copió- se , órnate, sapienter apud nos habuisti. JProbitatis argumenta mansueta índole, ho- ttestis moribus , et erga omnes comitate sese quam máxime commendant. Quid dicam de egregiis tuis in americanos meritis , qui bus tanti es rei- publicae praetii, et existimationis : ó quantum es terris iactatus, et alto , vt illis esses contra saeuientes variólas prae- sidio ! Non memorem in hac laetissima die patriam dulcissimam posthabitam, non [ vastum, Jluctibusque timendum atlanticum i \ (33) fon S la Nación . La naturaleza dándote una bella índole, te destinaba á tan digna suer- te , y túi has sabido merecerla con el es- tudio de las ciencias y la probidad de cos- tumbres: y obtenídola al ñn. emprendiendo obediente tus trabajos . En verdad qne la copia , el adorno y la doctrina de tus dos qüestiones acerca del Galvanismo y la Vacuna , no dexan nada que dudar sobre tus grandes progresos en el estudio de las letras : al mismo tiempo que tu apacible natural., la honestidad de tu por- te , y la dulzura de tu trato , son unos ar- gumentos irresistibles de la moral de tu alma . Y i qué diré del alto aprecio que te tas adquirido, trabajando en favor de los Ame- ricanos \ ¡O y quantas tormentas has . su- frido por mar y tierra para libramos de la viruela I No quiero amargarte el júbilo de esté dia, acordándote que dexaste tu cara (34) " fifágili trunco emetiendum, maque vd$a¡ syrtes, saxa , naufragiis niríúum iniqua f lambenda: animus meminisse horret. Quae quidem omnia, et alia pluri- ma pericula, et patienter etviriliter, et ^constanter snstinuisti, vt REGÍ piissimo pareres , nobisque suceurreres. Sed iam e tantis laboribus, quod felix, faustum- que siet , emersisti: forsdn et haec olim meminisse iuuauit. Nunc animus aerumms las sus , et pene oppressus benefactorutn memoria recreandus. Tot animae ab orci faucibus ereptae, pestilentia extincta: ho- nores quasi altero AESGULAPIO, et HIPPOCRATI concessi, quo tempore Roma i et Athenae diris confiktabantur ((3¡r) '^Patria , para entregarte en frágil leño á las furiosas olas del temible atlántico, y que le pasaste tropezando con sus baxios v pe- ñascos , famosos por les grande- naufragios cjue han causado . El ánimo .se horroriza recordando estos peligros . Pero tu obediencia al piadoso CARLOS, y tu compasión á la América afligida , te han hecho tolerar estos y otros muchos riesgos, con paciencia , con constancia y con firme- xa , y has conseguido salir de todos ellos lleno de honor y de felicidad . ¡ Ah ! Es- tos trabajos que se sufren en la juventud por el bien de los hombres, causan mu día complacencia contándolos en la ancianidad . Por ahora es preciso recrear tu ánimo a cansado y casi oprimido de las peregrinacio- nes y contratiempos con el dulce recuerdo de los beneficios que has hecho . Tantas vi- das arrancadas de los brazos de la muerte, (3«) aegritudinibus , non possunt non esse tibi máximo gandió et solamini. Sanctissimi quoque nostrí antistites^ qui cari patriae, cari sapientiae, cari virtuti occubuere tibi peregrinanti prospis- cient. Quamquam enim vinculis terres- tribus soluti DIVÍNAE IMMENSITA- TIS contemplationi , vt pie credimus, in- haereant, non possunt nos filios suos obli- uisei: quinimo quos in hac miseranda condi- tione pictatis exemphm habuimus , ipsos- met in aeterng, felicítate patronos, ác tutores fidissimos suspicimus. Quando ergo iuxta eorvm ritas et monimenta docto* r.em medicum te inauguro, suae parí- ter protectioni comrnendo* ( 3T > y. la pestilencial viruela extinguida , deben causarte mucho gozo : así corno te exaltan y llenan de honor las alabanzas y estimación con que te han recibido los Pueblos por don- de has transitado, no menores ciertamente que las que Roma y Atenas concedieron a Esculapio é Hipócrates, quando acudieron á socorrerlas en las gravísimas enfermedades que las asolaban . También aquellos de nuestros respeta- bles mayores que murieron llorados por la Patria, elogiados por los Sabios , y en olor de santidad, mirarán propicios tus peregrina- ciones . Porque aunque, rotos los lazos que los unia con la tierra, solóse ocupen, según creemos piadosamente, en contemplar la Divinidad, no pueden con todo olvidarse de nosotros que so- mos sus hijos: pues habiéndonos servido en esta vida perecedera de exemplo y modelo de piedad , deben ser en la eterna nuestros ( 38 )' Preme itaque ipsorum vestigia, vir- iutes imitator: iisdemque adiuuantibus pro- gredere , et reliquis Peruuii prouinciis esto auxilium. Fortunatissjimum Ameri- cae solum pestilenli sanie non vltra te- meretur . Vt dum tota Europa ingentibus et nunquam auditis armorum, et opinio- num dissidiis eonuulsa tremit: dum gens humana ruit per vetitum nefas , et coe- lum ipsum petimus stultitia, hoc sit magnánimo REGÍ nostro in tantis cala- mitatibus dulce solamen. (39) tutores y protectores fidelísimos; Así guan- do te iristaío en él grado de Üdctoi1 én Me- dicina , observando los estatutos y ceremo- nias que nos déxáron , té recomiendo tam- bi« á su patrocinio • Procura seguir" sus huellas en el ca- mino dé la Sabiduría, é iniitar sus virtudes. Prosigue baxo sus auspicios cómUríicando el benéfico fluido de la Vacuna á las Provincias del Perú que aun carecen de ella ♦ ; Quiera Dios que el suelo Americano, al qual ha fa- vorecido con tantos dones, no vuelva á ser infestado por la pestilencial viruela ! De este modo mientras tiembla la Europa convelida con el funesto choque de las armas y opi- niones : mientras los hombres se abandonan á crímenes inauditos , y con necio orgullo insultan al mismo Cielo; gozará nuestro mag- nífico REY , en medio de tan grandes cala- midades , el dulce placer de haber librado á la América de la mas cruel de las en- fermedades . / w flF,. _ .^, N ? „c ■«» ■ -.«.te iV <»...,'w j- -íc*' tii *\A " voz. 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